Un pais aislado del mundo carece de “modelo” : Luis Acosta Rivellini

En los últimos tiempos, se ha vuelto a instalar en el centro de las preocupaciones nacionales la vinculación Argentina con el Mundo. Es decir, se ha vuelto a poner en tela de juicio la política exterior de la Nación. Es explicable que resurja este debate, por que desde el vértice del poder nacional se continúa profundizando una política populista hasta el extremo de orientar nuestras relaciones exteriores. Así, por ejemplo el ex Presidente (esposo de la actual Presidenta) maltrató a Gorge Bush en la Cumbre de Presidentes de Mar del Plata ante las cámaras de televisión del mundo, protestando contra el ALCA y enjuiciando la política de Estados Unidos para América Latina, cuestión que de haberse planteado en una entrevista bilateral hubiera tenido (con o sin razones) su explicación. Pero si como eso hubiera sido poco, se organizó una “Contra cumbre” en la misma ciudad coordinada con Cuba (según se sabe ahora) y con la infaltable presencia de Hugo Chávez. Los Estados Unidos tomaron nota del desafío de Argentina y sus modalidades populistas de hostilidad que contrastaron con las posturas de Brasil, Uruguay y Chile. Aunque hoy exista un nuevo presidente en Estados Unidos, la diplomacia de los países tiene memoria.

Hace algunos meses, el Presidente Venezolano Hugo Chávez nacionalizó la empresa de capitales Argentinos SIDOR del grupo Techint. Allí, el gobierno Argentino acudió a sus diplomáticos para que se pagara una justa indemnización a la empresa damnificada, cuestión que luego de varios meses se consiguió. Pero hacen pocos días Chávez volvió a nacionalizar otras tres empresas del Grupo Techint. Lo hizo después de estar de visita en Argentina y de visitar el “Calafate” con el matrimonio Presidencial. Ahora se dice desde el Gobierno que bregará para que la empresa reciba una justa indemnización. No se le pidió al caudillo Venezolano que desistiera de la medida. Se adoptó una actitud de compromiso para “zafar con elegancia” del desaguisado del socio Bolivariano. Un verdadero papelón que fue repudiado por todas las entidades empresarias del país. Es que el Gobierno Argentino también es proclive a nacionalizar empresas, como ya lo ha hecho y se sospecha (no sin razón) que puede seguir haciéndolo en el futuro. La Embajadora Argentina en Caracas (Alicia Castro), justificó la decisión de Chávez, dijo que forma parte del proyecto de “Socialismo para el Siglo XXI” de ése país. ¿Puede convivir en el MERCOSUR un país cuya economía es incompatible con el Bloque? La respuesta muy clara de la U:I.A. es categóricamente NO. Y el último blooper lo protagonizó la Cancillería Venezolana, lo que dijo su presidente que “no se expropiaría ninguna empresa Brasileña” fue una broma!!!

A esto hay que sumarle que tenemos problemas con Brasil por las relaciones comerciales. Con Uruguay por la pastera Botnia en Fray Bentos. Con Chile por la falta de Provisión de Gas. Tuvimos hace poco un entredicho diplomático con México por la suspensión de los vuelos debido a la Gripe A que afecta a ése país. Con Europa, empeoraron nuestras relaciones con España, son irrelevantes con Alemania y Francia. Con Estados Unidos, todos los intentos por acercarse a la Administración de Barak Obama han fracasado hasta ahora. Anunciamos pero no le pagamos al Club de París. Seguimos despotricando contra el FMI, a pesar que ahora estaría dispuesto a ayudarnos de tener estadísticas confiables. Cuáles son los resultados entonces de nuestra política exterior, que constituye “la proyección hacia el mundo de los intereses de la Argentina?”

La respuesta es demasiado obvia y dramática: Estamos aislados del mundo. Hasta fines del año pasado negábamos que nos iba a afectar la grave crisis financiera internacional. La Presidenta llegó a decir que saldríamos indemnes de semejante desafío.

Luego, cambió de criterio y señaló que debía hacerse frente a la Crisis con todos los instrumentos de política económica, que bueno es recordar, resultaron insuficientes hasta los días que corren.

Ayer nomás volvió sobre el tema de “Techint” y dijo que se “había conseguido una justa indemnización por la nacionalización de SIDOR” y que “lamentaba que los primeros cuatrocientos millones de dólares que consiguió la compañía lo habían depositado en el exterior”. Como si los fondos de Santa Cruz los hubieran depositado en el país.

Ante este cúmulo de hechos incontrastables, no es posible otra conclusión que carecemos de política exterior en el actual Gobierno autocalificado de “Nacional, Popular y Progresista”. Por lo cuál, sin inserción de Argentina en el mundo, no hay “modelo” posible. O el modelo es otro cuento de la buena pipa, que los que gobiernan hoy la Argentina nos quieren hacer creer, como el que esto escribe cree fundadamente.